Búho nival
El 20 de noviembre de este año 2021 va a quedar bien grabado en mi memoria. Una vez me hice 700 km de ida y 700 de vuelta para ver un Megaceryle alcion (con éxito) y en otra ocasión repetí la misma distancia para ver una Pagophila eburnea (con fracaso). Llegó el momento que la humanidad llevaba esperando durante años. La paz había llegado a Ornitolandia, pero un acontecimiento inesperado sacudió sus cimientos. Oh, Excalibur, ¿eres tú el aliento del dragón? Muéstrame el camino de la gloria, quiero salir victorioso tras luchar en el campo de batalla y que se me abran las puertas del Valhalla. Quiero bimbar el búho nival. Como es bien sabido, hace unos días aparecieron tres ejemplares de esta especie en la costa cantábrica. Uno de ellos murió en un centro de recuperación tras ser recogido muy débil. De los otros dos, el más accesible era el de Cabo Peñas, en Asturias. A pesar de que tuve mis dudas sobre la posiblidad de ir o no a verlo (por la incertudimbre de la observación tras una ki...