Finlandia-Noruega 2007 (parte 3): de Lahti a Oulu

Yo no estaba en el coche en aquel momento, no mentalmente al menos. No recuerdo dónde me hallaba, pero lo cierto es que un ruído me devolvió a la realidad. El cuerpo me dolía. Estaba cansado. Abrí los ojos y frente a mí vi una tapicería. Me incorporé y choqué con el volante. Vaya, así que me hallaba en el Renault de Finlandia. Yo era el conductor y había dormido en el mismo asiento que ocupaba cuando aparqué el vehículo unas horas atrás en el párking de la carretera. Un movimiento a mi izquierda me llamo la atención. Sobresaltado, contemplé como una mole enorme (¿un mastodonte?) se desplazaba muy cerca de nosotros. Abrí los ojos del todo. El colosal animal ocupaba gran parte de mi campo visual. Y por supuesto no era un animal. Un gigantesco camión cargado de troncos intentaba maniobras imposibles para poder situarse tras nuestro coche sin tener que despertarnos para que lo moviéramos... Estaba conmovido... Aquel hombre prefería sudar haciendo malabarismos con un camión a tener que desp...