Coliazul cejiblanco (Tarsiger cyanurus)

Normalmente no suelo publicar una entrada en el blog el mismo día de la observación. Pero un Tarsiger cyanurus bien vale un esfuerzo extra.

El coliazul cejiblanco (Tarsiger cyanurus) es un pequeño pajarillo que vive en Siberia, y resulta que uno de ellos ha decidido pasar unos días (quién sabe si tal vez todo el invierno) entre nosotros. Internet se chivó de su presencia, y hoy domingo día 2 de enero de este recién estrenado año 2011 cuatro intrépidos ornitólogos han decidido cambiar el descanso dominical por un bimbazo sideral.

Daniel González, Lluís Hernández, mi sobrino Adrián y un servidor hemos cogido el coche esta mañana y nos hemos desplazado hasta Sant Feliu de Boixalleu, al pie del Montseny, en busca del afamado protagonista del día.

Al llegar unas pocas personas ya lo tenían vigilado y enfocado, con lo cual el avistamiento ha llegado muy rápido. La afluencia de ornitólogos ávidos de Tarsiger ha propiciado el reencuentro con viejas caras conocidas (Santi Guallar, Anna Gallés, Ferrán López, José Luis Copete...) pero también la oportunidad de coincidir por primera vez con otros ornitólogos como Bernat Iglesias.

Coliazul cejiblanco (Tarsiger cyanurus). Desafortunadamente, no quiso firmarme la foto.


El pájaro "se ha portado", permitiéndonos fotografiarlo y filmarlo. Por si fuera poco, el rato que hemos pasado en aquel bonito paraje junto al río Tordera ha estado amenizado además por la presencia de pico menor (Dendrocopos minor) y garceta grande (Ardea alba) y otras muchas aves interesantes.

Se da la anécdota de que cuando Dani, Cristina Prieto (hoy ausente) y yo viajamos a Finlandia en el año 2007 dedicamos algunas horas a la búsqueda del Tarsiger, sin éxito. En el país lapón existe una pequeña población, la más occidental de su distribución, y la oportunidad parecía única para tratar de bimbar esta especie, pero no hubo suerte. Quién iba a decirnos que pocos años después íbamos a tener la oportunidad de ver un ejemplar tan lejos de sus áreas habituales, a apenas unos sesenta kilómetros de Barcelona.

La presencia del ave ha levantado muchas expectativas entre los ornitólogos, congregando a grupos numerosos de gente todos los días desde su descubrimiento el pasado 26 de diciembre, como ya ocurriera en l'Estartit con el malogrado piquero de patas rojas (ver entradas anteriores del blog).
De derecha a izquierda, Anna Gallés, Dani González (de espaldas), Santi Guallar, Lluís Hernández, y servidor, el autor del blog, Jordi Sala.
Lluís y Jordi, reencuentro tras algún tiempo sin coincidir.

Tras disfrutar durante más de dos horas del avistamiento del coliazul y de la compañía de los presentes nos hemos marchado al Estany de Sils, situado a unos pocos kilómetros de distancia, para completar la mañana con algunas observaciones más. La idea ha resultado ser un acierto absoluto: un magnífico avetoro (Botaurus stellaris), rara ardeida que hacía tiempo que no veía, se ha sumado a la lista de observaciones de la jornada, así como avefrías (Vanellus vanellus), cercetas comunes (Anas crecca) y azor (Accipiter gentilis) entre otras especies.

Comentarios

  1. Enhorabuena Jordi, a ver si te pasas algún día por el foro.
    Saludos a Dani y Cristina
    Un abrazo Marga

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  2. Gracias Marga! Me falta tiempo hasta para respirar. En breve te enviaré un mailito, porque voy a empezar a publicar la crónica del viaje a Canarias y Salvajes, por si te interesa. Besos. No os olvido a ninguno.

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